¡Un VBAC después de dos cesáreas!

¡Un VBAC después de dos cesáreas!

¡Hace seis años comenzó su primer embarazo! Había estado buscando su bebé por algunos meses y ya ella creía que no podía tener hijos.
Pero un día llegó el tan esperado “positivo”, lo que llenó de gozo a la familia.

Se preparó durante su embarazo, porque ella y su esposo querían tener un parto lo más natural posible.
A las 41 semanas y 3 días (semanas calculadas por los sonogramas, puesto que su menstruación había sido siempre muy irregular), reventó fuente.
Su médico le exigió llegar de inmediato al hospital. Al llegar todo el personal hospitalario los estaba esperando. Todo estaba dispuesto para una cesárea.
Cuando la pareja le preguntó al médico cuál era la razón para la cesárea, él les dijo que los latidos del bebé estaban bajando y debía hacerla de inmediato.
Cuál fue la sorpresa de mamá cuando una hora después de su cesárea, ella quiso hablar con el médico y la atendió un médico designado diferente, pues el profesional quien había atendido todo su embarazo y había hecho su cesárea, había salido de viaje después de realizarla…

¡Pasaron dos años y medio, y un nuevo “positivo” llenó de alegría la familia!
La pareja conocía la posibilidad que toda mujer tiene de vivir un VBAC (parto vaginal después de una cesárea), lo que decidieron buscar con mucho celo en este segundo embarazo.
Las cosas se complicaron un poco cuando supieron que su embarazo era gemelar. Sin embargo se dedicaron a buscar un médico que les garantizara poder tener un parto vaginal, aun teniendo las dos circunstancias anteriores: la búsqueda de un VBAC, incluyendo el parto gemelar.
Este médico se los garantizó.
Les exigió varias condiciones: un embarazo sano (sin alto riesgo), que el embarazo llegara a término para que los bebés no fueran prematuros, que los dos bebés estuvieran en posición para el parto al finalizar el embarazo, que tuvieran el peso requerido y que la incisión de la cesárea anterior cumpliera los requisitos para permitir un VBAC (incisión horizontal), según el record médico.

¡Todos los requisitos se cumplieron!
El record médico anterior cumplió los requerimientos pedidos, cuidamos las membranas durante todo el embarazo de tal forma que llegó hasta las 38 semanas sin romper fuente a pesar del peso de las bebés, las dos bebés superaron las cinco libras lo que las alejó de ser prematuras y 15 días antes de las 38 semanas una de las bebés que estaba en posición de nalgas giró y se acomodó en posición para parto.

Cumpliendo ella las 38 semanas, el médico la citó para inducirle el parto. No me permitió entrar a mi como su doula y preparó todo para una cesárea. No le permitió trabajar ni le indujo el parto. La engañó e hizo cesárea.

¡No imaginan la frustración de mamá!
Por mucho tiempo mamá se lamentó haber llegado esa mañana a la supuesta inducción. ¡Lloró mucho! ¡Yo tengo que confesar que también lloré! ¡Era un reto tan grande ese parto! Pero se fue de nuestras manos…

¡Hace nueve meses volvió a tocar la puerta de este hogar otro regalo del Cielo!
¡Mamá quedó nuevamente embarazada!
¡Aspirar a vivir un VBAC después de dos cesáreas era un gran reto!
Debían cumplirse todos los requisitos anteriores, adicional a que en la segunda cesárea también hubiera habido el mismo tipo de corte; además de que debíamos encontrar un médico dispuesto y paciente para que sin engaños, le permitiera vivir a mamá el parto vaginal tan anhelado.
La pareja debería estar dispuestos a tener toda la paciencia para vivir tan grande reto. Se pusieron en manos de DIOS y prometieron seguir al pie de la letra todos sus requerimientos.

¡El pasado 24 de Julio ocurrió el tan anhelado nacimiento!
¡DIOS orquestó uno a uno todas las condiciones necesarias y cumplió el anhelo del corazón de mamá! Aunque en este parto fue probada grandemente su paciencia, pues fue un parto de 28 horas de duración, pudo tener a su bebé por parto vaginal. ¡Damos gracias a DIOS!

¡Yo tuve el privilegio de apoyar como doula a la pareja y vivir tan hermoso acontecimiento!
Gracias a la Dra. Rosana Rodríguez por su profesionalidad, paciencia y consciencia de la necesidad de permitirle a mamá el parto que más deseaba.

Con Fe, confianza en DIOS y en sí misma, decisión, paciencia y rodeándote del equipo médico y hospitalario que te apoye, se puede lograr un VBAC.
¡Se puede lograr el parto de tus sueños!

 

Por: Lina María Ortega Ch.
Autora Guía de preparación para el parto Vientre Seguro.
Educadora Perinatal. Doula certificada. Conferencista internacional.